Fútbol
El menospreciado Valdés: Van Gaal lo debutó y Van Gaal lo retiró
Con arrojo y juego de pies, el catalán revolucionó la portería e infelizmente colgó los guantes y salió por la puerta chica.
Hasta antes de Valdés, en Europa los porteros de los mejores clubes eran solamente buenos atajadores. El catalán cambió para siempre el concepto del guardameta.
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Era el 2002 cuando el holandés Louis van Gaal fue llevado al Camp Nou en su segunda etapa. Para su filosofía, él precisaba de un guardameta capaz de jugar con los pies.
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Eran años en los cuales el Barça dependía mucho de los fichajes del exterior y se miraba poco a La Masia.
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El entonces nuevo presidente blaugrana, Joan Laporta, fichó al guardameta sensación del Mundial 2002: el turco Rustu Recber.
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Recber logró el tercer lugar de Corea y Japón 2002 y llegaba con cartel de ídolo a Barcelona.
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Cuál no sería la sorpresa de todo mundo al ver al joven Víctor Valdés siendo titular en la escuadra de Van Gaal.
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De joven, Valdés era muy valiente, muy audaz. A veces incluso se pasaba de audaz.
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Pero el tema de la personalidad le ayudó a vencer a Rustu Recber y a acabar consolidándose como el titular del Barça.
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En el juego ofensivo culé, la defensa siempre juega muy adelantada y por ello es necesario un portero capaz de leer las jugadas y anticiparlas antes de que ocurran.
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Aunque era un equipo histórico, en el 2004 el Barça realmente no estaba obligado a ganar la Champions cada año. Valdés ayudó a forjar al Barça que hoy conocemos. Puso el listón muy alto.
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En un vestuario ya lleno de cracks, la voz de Valdés era de compañerismo y liderazgo.
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Pero Valdés no solamente era un portero formidable jugando la pelota y leyendo jugadas: también poseía unos reflejos felinos.
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A su estilo, ayudó al Barcelona a venir de atrás y ganar la Champions 2006 contra el Arsenal.
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A la llegada de Pep Guardiola, Valdés permaneció inamovible, pues sus cualidades eran idóneas para el tiki-taka.
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Valdés también conquistó la Champions 2009 en el Olímpico de Roma cerrándole la puerta a CR7 y a Carlitos Tévez.
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Con el Barcelona ganó La Liga seis veces y el Trofeo Zamora en cinco ocasiones.
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No fue sino hasta 2009 que en la selección española finalmente le dieron una oportunidad. Aunque por aquella época Casillas era incuestionable en el marco.
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Valdés salió campeón mundial en Sudáfrica 2010 y fue un gran apoyo psicológico para Andrés Iniesta.
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Valdés además llevó su buen rollo del Barcelona a la selección.
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¿Que por qué fue un apoyo psicológico para Iniesta? Iniesta venía de graves problemas musculares y temía desgarrarse durante el Mundial. Valdés le ayudó a superar el miedo.
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Sin duda alguna la Champions 2011 demostró que Valdés era el mejor guardameta del mundo. Desafortunadamente la prensa nunca lo consideró en su justa medida.
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Gracias a su guardameta titular, Guardiola podía concentrar a diez jugadores de campo en terreno enemigo y así generar mucho volumen de juego.
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Valdés fue un símbolo de La Masia como la que alguna vez fue la mejor fábrica de talento del mundo.
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Sin embargo, en 2014 dio un paso en falso: esperó el término de su contrato con el Barcelona y se fue al Mánchester United de Louis van Gaal.
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Con sus condiciones, podía haber peleado la titularidad. Pero algo pasó.
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Su competencia en Old Trafford era David de Gea, quien posee condiciones similares, aunque sin el juego de pies.
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Van Gaal tiene una personalidad explosiva y por algún motivo borró a Valdés del United.
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Así que Valdés dio otro paso en falso: se fue al Standard de Lieja de Bélgica a préstamo por seis meses.
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La última temporada la descendió con el Middlesbrough de la Premier League. Valdés ha colgado los guantes...
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